Después de tanto vagar por las calles, la ciudad te parece tan gris... Mejor hacerse un viaje al campo y sentirse libre para poder sentir. 

Este mensaje no será en vano cuando entiendas y puedas decir que en el árbol de la vida ninguna fruta está prohibida para mí.


Hoy voy a escribir sobre mi familia... mi familia de verdad (excluyendo a mi hija porque es demasiado chica para meterla en la misma bolsa y porque ella, creo y espero, va a ser producto de un mundo y una madre totalmente diferentes). Hoy voy a criticar a mi familia, aunque sin hacerlo con maldad porque, como dije, son mi familia "de verdad", es decir, no la de sangre exclusivamente, sino la que de verdad se merece el título de "familia", y los amo y sé que son excelentes personas, pero igualmente tienen, como todos, sus defectos... Defectos que parecen ser defectos sólo ante mis ojos, pero bueno...


Siempre sentí que había nacido en la familia incorrecta. No es que no los quiera, ni que sea infeliz con ellos, sino que simplemente no encajo del todo en su estructura. Digamos que ellos son demasiado conservadores en todo sentido y yo... yo no. Toda mi vida se trató de ir en contra de lo impuesto, aunque lo impuesto a veces tenía más razón que yo, pero no importaba, porque siempre creí y sigo creyendo que es absolutamente necesario mandarse grosas cagadas en la vida para aprender. En fin, mi familia no coincide conmigo. Igualmente me aceptan, me aman, etcétera, etcétera, pero algo sigue sin estar... bien (y vaya uno a saber qué será "bien"!).


Hace mucho que me vengo planteando que mi vida no es lo que quiero, sólo que antes no sabía qué era lo que sí quería... o no quería aceptarlo o admitirlo. Pero ahora ya lo sé, y creo que de eso ya no hay vuelta atrás. Cuando uno descubre qué quiere para su vida, en el aspecto más amplio y general de la frase... de eso ya no hay vuelta atrás. A partir de ahí, lo único que resta es luchar para conseguirlo... de lo contrario, vas a ser un fracaso toda tu vida. Un fracaso no por haber fallado, sino por no haber hecho todo lo que tenías a tu alcance para lograr tener la VIDA que querías. LA VIDA. Eso es demasiado. ¿Cómo no luchar por la VIDA? Si es lo único que tenemos, si es todo... ¿Para qué vivir una vida que no querés sólo por miedo a vivir la que te gustaría? ¿Por qué? Por estructuras, límites, imposiciones, estupideces de la sociedad que ni siquiera nos son propias... por cosas ajenas, por trabas que nos pusieron vaya uno a saber quiénes que decidieron imponernos que se nace para estudiar, se estudia para trabajar, se trabaja para ganar plata, se gana plata para comprar cosas innecesarias que queremos para llenar nuestros vacíos existenciales de no saber quiénes somos sin todas esas cosas...


¿Y qué si yo me quiero ir a vivir al campo y comer de lo que cultivo en el patio de mi casa y no tener plata para comprar ninguna estupidez más? ¿Y qué si no quiero mandar a mi hija al colegio porque quiero que viva libre toda su vida rodeada de árboles y pájaros y no de edificios y humo, aprendiendo sólo lo que tiene ganas de aprender, como sea que su curiosidad e ingenio se lo permitan? ¿Y qué si prefiero un río a una ducha, tierra a asfalto, pasto a parquet, estrellas a techo? ¿Y qué si sueño con deshacerme de la mayoría de las cosas materiales que tengo en vez de soñar con seguir comprando más y más? ¿Y qué? ¿Y qué?


Todo lo que quiero en este momento es, como escribí en unas líneas que le dediqué a mi hija hace un tiempo, es "hacer todo lo que quiero, tener todo con lo que sueño. Quiero quererlo con tantas ganas que todo lo que me impide hacerlo pase a ser insignificante". Quiero tener los ovarios bien puestos para animarme a ser dueña de mi propia vida... para no seguir sentada esperando una excusa para hacerlo.


Y en un revés a mi destino, un día de estos yo me animo...
Me voy a ir a vivir a la montaña, donde todo es poco pero igual alcanza.
Me voy a ir a vivir a la montaña y que me despierte el sol a la mañana.
Siempre me pregunté por qué la gente es pija...
¿De dónde les surge esa imperiosa necesita de cagarse en los demás?
¿No pueden simplemente ser buenas personas?
¿Tanto cuesta tratar bien alguien, no decir cosas hirientes cuando no son ni remotamente necesarias, aceptar las decisiones del otro sin intentar manipularlo para que termine haciendo lo que uno quiere pero no lo que esa persona de verdad quiere?
Será resentimiento con la vida, qué sé yo!
Quizás porque los cagaron alguna vez a ellos y ahora ellos quieren cagar a otros...

Y así el ciclo se repite infinitamente...
Quizás porque sencillamente son infelices y no soportan que nadie más sea feliz,
y quieren arrastrar a todos a su mismo bajo y triste nivel de infelicidad...
Y así el ciclo se repite infinitamente...

Un regalo de cumpleaños...


Y así, recostada sobre su pecho, tras haber actuado tristemente de novia toda la noche, pensó que quizás sí lo quería, que sentía por él un extraño afecto demasiado razonable para llegar a ser amor.

“Demasiado… insuficiente”, pensó.

Éstos, ésos y aquéllos.


Starbucks, Mc Donalds, pelo de colores, dubstep, patineta/rollers, piercings, expansores, tatuajes muy old school, ropa preferentemente negra y roja (sin orden de importancia).

Eso son...

Cosas viejas II

¿Se puede extrañar a alguien después de más cuatro años de haberlo dejado atrás?


Hoy estoy cursi.


Miré tus fotos mordiéndome los labios.


Creo que cada vez que te veo, sin importar cuántos años pasen,


sigo queriendo violarte :)

Cosas viejas I

Un borrador que me encontré por ahí, de esos tiempos en los que no era feliz:


¿Cuán difícil puede ser decidir lo que uno quiere y delimitar lo que uno no quiere?


Yo sé que la gente "normal" no tiene estos problemas, lo sé...


"Yo sé que no puedo con mi genio" le dije a mi psicólogo.


El psicólogo me habla como si la vida fuese fácil,
como si pudiera resumirse a hacer lo que uno quiere y no hacer lo que uno no quiere.


¿Por qué no es así de fácil?


Odio esto.


No tengo los ovarios bien puestos, eso pasa.


Encontré algo, por fin, algo que creo que quiero... y creo que descubrí que hay algo que no quiero.


Ya me había planteado esto antes...


No es que haya algo que realmente me impida hacer lo que quiero, es simplemente que no tengo los huevos suficientes para hacerlo. No tengo los huevos para romper esquemas sociales y familiares, para terminar con expectativas puestas en mí, para dar explicaciones sobre lo que elijo (o no darlas, en todo caso, porque la única "explicación" sería: HAGO ESTO PORQUE QUIERO Y PUNTO, sin importar si me conviene o no, si me voy a cagar de hambre o no).

Negra resentida: Mode On

Los chetos tienen una extraña obsesión con:
  • Los buzos GAP.
  • Sacarse fotos haciendo obras de caridad y subirlas al Facebook para que todos sus amigos chetos les comenten "Sos una excelente persona".
  • Declararse siempre en contra de CFK, los zurdos, los gays, la marihuana, etc.
  • Ir a la iglesia.
  • Horrorizarse cuando ven que la gente mata animales para comérselos (y yo me pregunto... ¿de dónde mierda se creen que salen los asados que comen todos los domingos?)
Bueno, eso. Chau.

I'm back.

Volví.
Hola, soy yo.
Volví.
Volví a ser feliz.
Volví con la simpleza de ser,
de ser feliz.
No tengo y no hago más que antes,
pero sí soy más.
Soy feliz, simplemente.
Por ser simple, soy feliz.
Mi vida no es extraordinaria,
no hago cosas audaces,
no soy sobresaliente
ni tengo una vida excitante ni fantástica.
Tengo la misma rutina todas las semanas,
me gusta ver los mismos programas de televisión siempre,
me gusta hacer lo mismo todos los fines de semana,
sólo me relaciono con la misma poca gente de siempre.
Pero soy feliz.
Voy a la Facultad siempre con el mismo horario,
los mismos días
a ver las mismas caras,
pero me siento feliz,
inmensamente feliz,
porque es lo que me gusta,
porque me gusta esa rutina,
MI rutina.
Todas las tardes me las paso encerrada en mi casa con mi hija,
veo alguna serie en televisión
y a la noche me voy a dormir con ella,
y quizás leo un poco de Historia del Arte antes de cerrar los ojos,

pero me siento feliz,
inmensamente feliz,
porque es lo que me gusta,
porque me gusta esa rutina,
MI rutina.
Los fines de semana no salgo de noche,
o salgo sin arreglarme sólo a ver a mis amigas
para fumar un porro y reírme un rato;
sino salgo de día al parque a tomar mates,
comer criollitos
y charlar con las únicas dos amigas que tengo
mientras More juega y se aburre por ratos,

pero me siento feliz,
inmensamente feliz,
porque es lo que me gusta,
porque me gusta esa rutina,
MI rutina.

Marcy's song.

El sexto sentido de las mujeres.

¿Cómo sé que me va a venir?
Porque me dan ganas de llorar por TODO.
Quiero llorar porque siento que paso poco tiempo con More,
quiero llorar porque no pude adoptar una perrita
y afuera hace frío y pienso lo mal que la debe estar pasando,
quiero llorar porque vi un programa sobre "niños piel de cristal"
y me da la sensación más horrible del mundo ver a otros sufrir así,
quiero llorar porque... porque todo... porque nada.
QUIERO LLORAR!

Y punto.









Luna.


Mercedita.


"Z" de Zorro.


Madame.


Agarrate, Catalina.


The stalker.


aaaaaaaaah! manga de putos! todos!
forros hijos de puta!

putos hijos de puta, hijos de puto, puta, putos, putas,
culo, teta, concha, pija aaaaaaaaah!
en fin, quería insultarlos a todos.
chau.


P/D: tu máma culo pila!

Pueblo chico, infierno grande.

Ya sé que voy a sonar como esas típicas minas que se van a estudiar afuera y vuelven creyéndose superiores al resto de las personas que todavía no salió nunca del pueblo... Pero no me importa, porque yo sé que lo que digo no es por sentirme superior, sino simplemente porque uno de lejos, desde afuera, ve todo diferente que desde adentro y, sobre todo, ve más defectos que desde adentro. Es lo mismo que pasa con los novios... cuando estás saliendo con un loco, re enamorada, lo ves perfecto, lindo, bueno, tierno, te encanta, vivís en una nube de pedo... pero cuando cortan ya entras a verle todo lo malo: que es medio chueco, que no usa perfume, que es hijo de puta, que tiene la pija chica, que blablabla... En fin, eso me pasa a mí con mi ciudad, o mejor dicho, más específicamente, con la gente de mi ciudad.


¿Las minas no se cansan de estar metidas siempre en los mismos puteríos? Veo locas que siguen armando quilombitos baratos de pueblo choto que yo armaba cuando tenía 16... y las locas ya tienen 20 años, 25, 28, 30... tienen hijos, esposos, amantes, trabajo, mil cosas, y siguen sin madurar. ¿Tan aburrida es mi ciudad que no tienen otra cosa que hacer más que armar y/o fomentar peleas de conventillo? Y encima si te tiran la bronca y vos no se la seguís te tratan de cagona, se te cagan de risa porque "te les cagas". No me cago, flaca, es que simplemente no me veo agarrandome de los pelos y a los arañazos con vos teniendo 20 años, siendo mamá y... bueno, no sé qué más, pero simplemente no veo así, me parece una terrible pelotudez meterse en esas huevadas, no les encuentro sentido... es más, me parece que lo único que demuestra de tu parte es una terrible inmadurez y falta de seguridad en vos misma.


Y después están las otras y los otros, que tienen 90359340 años y siguen manteniendo relaciones enfermas con sus parejas. Si ambos saben que el otro es un/a hijo/a de puta ¿para qué se siguen buscando roña? Lo único que ganan buscando cosas que no quieren encontrar, es hacer que el otro la próxima la haga mejor, les invente una mentira mejor, les omita más cosas... porque cambiar, ninguno va a cambiar; lo único que van a hacer es ocultar mejor quiénes son, fingir mejor ser otra persona. Pero igual siguen en una venganza constante contra quien supuestamente aman, en una lucha interminable por quien hace sentir más culpable al otro...


¿No se cansan? Es lo único que me pregunto siempre sobre todas estas cosas. Yo también tuve relaciones enfermas así, también armé bardos estúpidos con minas que no me bancaba... pero ya pasó, loco, se nos pasó la edad. Yo no veo ya metida en puteríos de minas o teniendo una noviazgo enfermo como esos, ya me cansé de eso, ya pasé a otra etapa de la vida... ¿por qué el resto de la gente no siente lo mismo? Estoy segura de que es por la estanqueidad (? por no haber salido nunca de la ciudad, por no haber vivido nada más que ESO y eso y eso, todo el tiempo ESO.
"Normalmente, cuando las personas están tristes no hacen nada. Sólo lloran sobre su condición. Pero cuando están enfadadas, provocan el cambio."


Malcolm X.
En la novela "La nueva Eloísa", de Jean-Jacques Rousseau, el joven héroe, Saint-Preux, realiza un movimiento exploratorio del campo a la ciudad, y escribe desde allí a su amada, Julie, contando: "Todo es absurdo, pero nada es chocante, porque todos están acostumbrados a todo (...) La multitud de objetos que pasan ante mis ojos, me causa vértigo. De todas las cosas que me impresionan, no hay ninguna que cautive mi corazón, aunque todas juntas perturben mis sentidos, haciéndome olvidar quién soy y a quién pertenezco."


Buena manera de describir la vida del hombre moderno, don Rousseau.
Y en un revés a mi destino, un día de estos yo me animo.
Me voy a ir a vivir a la montaña, donde todo es poco pero igual alcanza.
Me voy a ir a vivir a la montaña, y que me despierte el sol a la mañana,
no como en la ciudad, que el sol te dice "andate a dormir".

¿Qué me impide dejar todo, conseguirme un trabajo en la puuuunta de un cerro, alquilarme una casita donde sólo entremos More y yo, e irme a vivir tranquila a la puna jujeña?
ya no me peino.
mi pelo ya ni siquiera se despeina de tan aburrido que está.
es lacio, laaacio.
una cosa recta que cae sin gracia.
y tiene un color rojo acastañado indefinido horrible.
creo que voy a tener que ir a la peluquería.
no está bueno querer hacer dieta y que no haya nada en tu heladera,
porque terminas llamando al delivery para que te traigan un lomito de 894234092 kilocalorías.
En mi cabeza, un chulo.
En mis pies, unas zapatillas con cien años de uso encima.
En mi mano, un tetra arremangado.
Adentro, vino barato con gaseosa sin hielo, pero frío igual,
porque esta noche todo está frío.
Arriba, las estrellas, que desde acá se ven más claras que desde ningún otro lado.
Abajo, tierra que se quiebra de tan seca, piedras y alguna que otra plantita que pincha.
Al costado, una carpa y un perro esperando que alguien le tire un pedazo de pan.
Adelante, miles de kilómetros por recorrer, decenas de pueblos por conocer.
En la mano de mi amiga, un faso.
En su cara, una sonrisa que invita.
De mi boca sale un "gracias".
Se escucha a alguien tocando una guitarra criolla,
y suena un folclore que me hace sentir en casa.
En mi cara, una sonrisa.
Dicen que hay que afrontar los problemas, que no hay que huir de ellos... Pero ¿qué sabe la gente?

"La gente"... Cuando uno se refiere a "la gente" generalmente es gente de mierda que no pincha ni corta en nuestras vidas pero que se da el lujo de opinar y juzgar sin conocer diciendo cosas que nos hieren.

Habiendo aclarado esto, prosigo: La gente no sabe un culo. La gente no tiene vida. La gente vive de criticar a los demás para sentirse un poco mejor con sus patéticas vidas que sólo consisten en eso, en sacar el cuero. La gente se cree perfecta y es una mierda. La gente... La gente... La gente se representa en mi papá y su familia.

Bueno, "la gente".

La gente es mi problema.

Creo que esta vez voy a optar por no hablar más con la gente, voy a darle la espalda a mis problemas, voy a ignorarlos, voy a huir de ellos... como quieran llamarle. Pero no tengo ganas de enfrentarlos.

Lo que en realidad pasa es que no hay nada que enfrentar; estuve frente a esto toda mi vida, y hoy decidí que no quiero tenerlo más ahí, que me hartó, que me saturó, que me hace mal, que lo necesito fuera de mi vida para ser feliz.

Hay "gente" con la que simplemente no puedo mantener una relación. ¿Tenemos que mantener una relación a pesar de que chocamos en exceso y ni siquiera nos queremos sólo porque somos padre e hija? No. Sinceramente creo que no, porque ni siquiera puedo decir que somos padre e hija. Mi mamá sí es mi mamá; ella fue madre, padre, hermana y amiga. Mi papá fue... como un tío segundo que tiene la obligación de mantenerte. Entonces ¿por qué tengo que respetarlo tanto y callarme ante sus idioteces? ¿Porque es mi "papá"? No, señores. Mi vieja me crió para no agachar la cabeza ante ningún hombre, y voy a aplicar eso incluso con mi propio padre.

Si tengo que definir a mi papá te digo lo siguiente: Es un idiota machista que se cree perfecto y jamás va a cambiar por nada. Y a esto que te digo tomatelo al pie de la letra porque es así, tal cual.

Y si tengo que contarte un poco sobre mí te digo lo siguiente: Cuando sé que algo está mal (y recalco que digo "sé" y no "creo") se lo voy a decir en la cara a quien sea, sin importar jerarquías, edades ni nada. Lo que está bien, está bien, y lo que está mal, está mal, y a la mierda. A mí no me vengan con eso de que "Todos sabemos que está mal pero no se lo podes decir porque es un hombre grande, porque es tu papá". NO. Si está mal ¿por qué no le puedo decir las cosas en la cara? Después de todo yo estoy diciendo la verdad y el que está mal es él, yo no tengo de qué avergonzarme. Vergüenza sería hacer lo que hace él, ser como él.

Conclusión: Con mi papá jamás nos vamos a llevar bien.

Hace unos días le dije a mi mamá: "Está así de que lo deje de hablar"... Y unos días después llegó el "así".

Ya está, ya fue. Yo no voy a aguantarme pelotudeces de ningún idiota con aires de superioridad ni me voy a callar ante uno, ni le voy a agachar la cabeza sabiendo que NO tiene razón. Y si no le gusta como soy ¡vaya a llorarle a su máma!

Sé que él nunca va a cambiar, ni aunque yo lo putee, ni aunque peleemos, ni aunque lo amenace con dejar de hablarlo toda la vida, ni aunque corra el riesgo de perder a su hija... jamás. Su ego pesa mucho más. Nunca se va a dar ni siquiera un segundo para aunque más no sea plantearse a ver si podríaaaaa ser que yo tenga razón y él no. NO, jamás! Su palabra es palabra santa y todos los demás no saben nada, menos si son mujeres.

Entonces, ¿para qué seguir teniendo en mi vida a una persona así? ¿Para seguir largandome a llorar cada vez que me dice cualquier pelotudez basuréandome? No, no y no. Yo no soy alfombra de nadie.

El único tipo de mujer capaz de tener una relación con mi papá es: a) una mujer que no le de bola en lo más mínimo y sólo mantenga una relación superficial con él sin hacerle caso a nada de lo que diga pero sin enfrentarlo tampoco; y b) una mujer no pensante que obedezca todo lo que el pelotudo quiere, que le limpie, le lave el culo, le planche, le cocine, le levante la ropa sucia del piso, le sea fiel, se aguante sus infidelidades callada, jamás lo contradiga, etc, etc. Nunca fui el tipo b, y ya no quiero ser más el tipo a. Por ende, ya no puedo tener una relación con él. Se acabó.

Mi crisis no es una crisis vocacional ni sobre mi maternidad ni de desarraigo... Es una crisis existencial.
En este verano me planteé qué quiero para mi vida, cómo quiero vivir y quién quiero ser.
Antes me preguntaba quién era, ahora me pregunto quién quiero ser. Y ahora me siento en paz.
Ahora siento que por fin tuve el valor suficiente para hacer de mi vida lo que quiero,
para dejar de vivir con las presiones de lo que se espera de mí, de lo que yo espero de mí.
Hoy todo dejó de importarme, a pesar de que hayan cosas que sigan afectándome...
Porque hay una gran diferencia entre que algo te importe y te afecte.
Puedo agachar la cabeza y sentirme mal un rato por algo que me afecte,
pero pasado ese rato vuelvo a mirar para adelante, para arriba, y puedo sonreír en paz
sabiendo que por más daño que me hagan algunas cosas yo voy a ser feliz.


Siempre me hace bien volver a mi tierra para aclarar mi cabeza...
Nunca están de más unas buenas vacaciones,
unas buenas charlas con mi mamá,
un buen tiempo de ocio para poder pensar bien las cosas.
Y entonces me encuentro en plena puna jujeña,
acostada en una carpa respirando aire puro y pensando
"Esto es lo que quiero para mi vida"...
Y me encuentro abriendo un libro que acaba de devolverme mi abuelo
y leyendo así a la primera, como mensaje del destino:


PIEDRA SOLA
Poemas del Cerro
En la montaña toda fuerza definida se convierte en ejemplo.
A la vera del camino hay una piedra enorme, mostrando a los vientos la grandeza de su soledad.
Quién sabe qué tempestades desataron los genios de la montaña
para arrancar ese pedazo de cumbre y hacerlo rodar hasta el valle.
Y esa piedra conserva en el llano la misma solemnidad de cuando era cumbre,
de cuando ofrecía su atalaya de granito a los cóndores.
Piedra sola supo de cielos claros, de soles ardientes y de lunas vagabundas,
de nieves implacables, de vientos libres, de alas potentes y de vertientes misteriosas.
Piedra sola no cayó para ser olvidada.
Tal vez comenzara ahí, en el valle, su verdadera misión, su verdadero destino,
a la par de los cardones, protegiendo a los arrieros con su sombra.
Para el viajero que pase y la mire con ojos de turista,
Piedra sola es un peñasco enorme, parado junto al camino, y que no tiene ninguna significación.
No servirán los ojos para mirar hacia arriba y descubrir el hueco dejado en la cumbre
desde donde rodara la noche del huracán.
No alcanzarán los ojos a ver las cenizas junto a la piedra,
donde tantos viajeros de la vida levantaron sus fuegos para protegerse del frío.
No alcanzarán los ojos a penetrar la grandeza del peñasco,
que en el valle no es una piedra más, sino la Piedra sola, que es fuerza, definición, ejemplo y símbolo.
Más que una derrota, su posición es un triunfo.
Hay que creer en la Verdad de todas las cosas de la naturaleza.
Las piedras cuando son de un solo bloque tienen un alma grande.
En esa alma, la montaña guarda todo su secreto, todo su silencio, toda su fuerza...
Piedra sola es el símbolo de una vida.
Es la fuerza de un espíritu que se ha mantenido firme a través de todas las angustias.
Hay seres contra quienes la vida desata de pronto un vendaval de sombras y abismo,
y los derrumba sin cauce ni ritmo, dejándolos ahí, junto a un camino cualquiera, como una Piedra sola...
Pero no son cosa muerta en el paisaje.
El dolor, cuando se lo sabe sufrir con dignidad,
crea fuerzas que agigantan el espíritu y aclaran el horizonte.
Hay seres que pueden mostrar su entereza y dar, en la cumbre o en el llano,
el ejemplo de un valor puro, de una emoción pura.
Muchos destinos que parecen llamados a darse a la vida en un gran continente,
terminan realizándose de verdad en un terreno humilde y claro, en un espacio pequeño,
pero lo suficientemente apto para que se cumpla la misión de vivir con el pensamiento y con el corazón.
Es la Verdad que se va realizando en el silencio de una pena bien guardada.
Es el símbolo de un espíritu que ha llegado a la serenidad por los caminos del dolor.
Eso es Piedra sola.

Y es que ahora entiendo que no nací para ser grande, sino para ser feliz.