Es muy feo que una estúpida te arruine el paseo por la Feria Internacional de Artesanos al pasar al lado tuyo hablando por celular "Pero o sea, eran peruanos blancos, no eran negros!" con voz de "Oh! What a surprise!" Pero por qué no te pegas un tiro en la concha y te sacas la bala con una pincita de depilar pelotuda del orto!?! ¬¬
Y lo peor de esta locura es que está sólo en mi cabeza.-


Cuando menos busco, más encuentro.
Cuando más quiero, menos tengo.
Cuando menos pienso, más vivo.
Cuando más analizo, menos experimento.


Es la ley de mi vida.

Esquizofrenia climatoide (?

En verano reina la fiesta, el carnaval y la música, corre el alcohol, abundan amigos, se vive de noche, se ríe de día. Con el calor nada importa, todo es efímero, las cosas pasan sin tocarme, me burlo de mis problemas y me rehúso a mirar más allá del ahora. El calor me da sed, mi sed llama al vino, mi vino pide hielo, al hielo lo traen los amigos. Las charlas alegres son cosa de todos los días, nunca falta oportunidad para reunirse. El verano está lleno de colores, de agua, de sol y de gente sonriente. El verano es perfecto, salvo porque con él me olvido de que tengo obligaciones y nada más me importa que divertirme. El verano me hace pensar que la única forma de felicidad está escondida en bailar y amar de a ratitos.
En invierno, en cambio, reluce mi lado intelectual, adulto, maduro, analítico. El frío me regala grandes verdades, me abre los ojos a cosas que siempre estuvieron ahí pero nunca pude ver. En invierno todo se analiza y me sobran crisis, de esas que me hacen desechar cosas viejas para aceptar las nuevas con un poco más de optimismo. Cuando hace frío, como muchos animales, este ser humano hiberna, se vuelve introvertido, familiero, estudioso y guarda en un cajón de su placard las ganas de enfiestarse y charlar con gente que, como su alter-ego veraniego, no tiene interés en otra cosa más que vivir de fiesta. El invierno también trae consigo la melancolía y las ganas de abrazos; cualquier recuerdo es válido para ponerse triste y necesitar a alguien a quién querer hasta que el frío pase. El frío es, a la vez, cruel y generoso, porque me regala sabiduría, pero sólo si estoy dispuesta a sacrificar cosas y personas para obtenerla. El invierno me ayuda a ir delimitando cada vez con más precisión quién soy y qué quiero, y eso me vuelve cada vez más vieja, lo que me hace creer que, aunque haya nacido en pleno carnaval, yo me hago un año más grande recién en el invierno. Hoy tengo 19 inviernos encima.


Buenas noches!

Charla conmigo misma.


_ Últimamente estoy pensando demasiado en las cosas que quiero para mi vida, estoy delimitando muy claramente lo que quiero y lo que no, y cualquier cosa que entre en los "No" va quedando totalmente fuera de mi vida, y me da miedo quedarme sola...

_ Mejor sola que mal acompañada.

_ ¿Será?

_ Y vos fijate: Todos al crecer vamos quedándonos con menos personas alrededor, y no se puede negar que las personas mayores son las más sabias, aunque sean las que más solas estén.

_ Es verdad... Pero ¿estará bueno canjear personas por sabiduría? Además, yo nunca quise ser como todo adulto...

_ Madurar no es sinónimo de volverse aburrida. Y la sabiduría te llega quieras o no; No podés elegir entre personas o sabiduría, pero sí TENÉS QUE DECIDIR si con esa sabiduría podés seguir al lado de ciertas personas o no.

_ ¿Y si no puedo?

_ No preguntes, vos sabes que es una afirmación: No podés, y lo que haces en ese caso es dejar a esas personas atrás hasta que vuelvan a estar en tu misma frecuencia o hasta... nunca.


* Aclaración: Con sabiduría no me refiero a haber leído más libros, saber más sobre anatomía, política o matemáticas... sino al saber de la vida, a ese que se gana con el solo vivir. Mientras más cosas vivo, mientras más veces me caigo, mientras más cagadas me mando, mientras más me pega la vida, más aprendo, más sabia me hago.
BASTA!

Te quiero eliminar de mi Facebook, quiero que vivas en otra ciudad, no quiero tener de amigos a tus amigos ni que vos tengas de amigas a mis amigas, no quiero que me hables ni encontrarte en el colectivo nunca más, no quiero que me chatees ni que me mandes mensajes, no quiero salir con vos el fin de semana, no quiero cruzarte en el boliche, no quiero verte nunca más, no quiero que surjas en una conversación, no quiero imaginarme tu cara, no quiero pensar vos, no quiero que sigas existiendo en mi mundo.

ME ASFIXIASTE, TE ODIO!

Mil disculpas, no es tu culpa, pero tenés que entender: ESTOY LOCA. Haberte visto más de cuatro veces me hace sentir acorralada, hace que sienta asco de vos, hace que vea con suprema claridad absolutamente todos tus defectos.

NECESITO TERAPIA.
Tengo un ayudante de anatomía con una cara de chupa pija tremenda. No, no tiene cara de trolo ni de gay, tiene cara de chupa pija. Y es más feo que encontrarse con Guido Suller al lado de tu cama desnudo en plena madrugada. Encima siempre que habla con el jefe de la comisión (que es una cosa horrible, también) lo hace queriéndole chupar (la pija) las medias y lo mira con una cara terriblemente asquerosa de "Si me llevas a tu casa, al baño o a cualquier baldío te entrego todos los orificios de mi cuerpo" :/ Y lo que más odio: Se cree el mejor. El otro día estaba haciendo unas preguntas y se calentó porque yo le respondía todo bien (tranqui jaja) entonces cuando hizo otra y le quise responder me dijo "Bueno bueno, ya está, tranquila, que responda otro" con una sonrisita irónica y una cara de (chupa pija) "Pobre pendejita, se cree que sabe más que yo". Estuve a punto de clavarle las uñas en los ojos, escupirle la cara, tirarlo a la cuba con formol e irme riendo con cara de sociópata. Gente como él hace que odie cada día más a los médicos.

Un año más de admirarte.

Sos lo más grande que hay.


Y llevar tu sangre me llena de orgullo.