Borrón y sumo a mi cuenta.

Por un rato pensé que fui una idiota, que me tendría que haber ido con mi hermana y mi beba a pasar el finde largo lejos, porque ahora la extraño tanto pero tanto que mi cuerpo no lo aguanta y mañana me voy a tomar el primer colectivo que consiga. Pero por otro lado lo pienso y, por más que esté sufriendo muchísimo lejos del amor de mi vida, este día sin ella me sirvió para abrir los ojos. Me pasé un par de horas sola en la casa pensando y pensando, analicé cosas que yo misma había dicho antes y cosas que me dijo una amiga muy sabia, después hablé con otra amiga que estaba pensando y pasando lo mismo que yo, y al final tomé una decisión: Voy a colgar los guantes.

Los excesos eran para las vacaciones, para UNAS vacaciones... pero esas vacaciones ya pasaron. Los excesos estuvieron "bien" (o fueron esperables, mejor dicho) mientras estaba en crisis y no sabía qué hacer conmigo... pero esa crisis ya pasó. Los excesos tuvieron son buenas excusas por un tiempo... pero ese tiempo ya pasó.

Es hora de dejar de justificar las cagadas que me mando y ponerle el pecho a la bala. Es hora de afrontar mi realidad y hacerme cargo de ella. Es hora de darme cuenta que ser ciertas cosas me impide ser otras. Es hora de entender que no se puede tener todo siempre ni todo junto. Sí, por mucho que me duela decirlo... Es hora de crecer.

Porque entendí que, aunque me cuesta aceptarlo, todo en la vida se maneja con prioridades. No se puede hacer todo a la vez ni ser todo a la vez. Aunque sí hay cosas que uno es sin darse cuenta y sin importar cómo ordene sus prioridades... y eso también lo entendí esta noche. Porque sin importar lo que elija, uno sigue siendo sus valores, sus principios, su crianza, sus costumbres. Y no puedo seguir eligiendo para mi vida cosas que van en contra de eso. Tengo que dejar de creer inconscientemente que me merezco menos de lo que puedo tener. Tengo que empezar a apuntar más arriba.

Hoy de nuevo empiezo de cero. Sí, sé que soy extremadamente bipolar y cambio de ideas a cada rato, pero de verdad empiezo a pensar que cada vez lo hago para mejor, y cada vez soy más feliz con lo que voy sumando a mi repertorio de convicciones y certezas, a mi alcancía de sabiduría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario